La Navidad trae consigo alegría, risas y, a veces, una inevitable resaca que nos recuerda los excesos de las festividades. A continuación, hablaremos sobre cuatro curas naturales que podrían hacer que te recuperes más rápido.
Beber alcohol, especialmente en grandes cantidades, puede estar acompañado de varios efectos secundarios. Una resaca es el más común, con síntomas que incluyen fatiga, dolor de cabeza, náusea, mareo, sed y sensibilidad a la luz o al sonido.
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Desayuna bien, una comida saludable es uno de los remedios más conocidos para una resaca. Una razón es que un buen desayuno puede ayudar a mantener tus niveles de azúcar en la sangre.
Duerme lo suficiente, el alcohol puede causar trastornos de sueño y puede estar asociado con una disminución en la calidad y duración de sueño para algunas personas. Dormir bien por la noche y permitir que tu cuerpo se recupere puede ayudar a aliviar los síntomas y hacer que la resaca sea más llevadera.
Fiestas sin resaca…
Mantente hidratado, beber alcohol puede deshidratar de diferentes maneras, incrementa tu ingesta de agua. Al beber alcohol, una buena regla general es alternar un vaso de agua y una bebida, aunque esto no es necesariamente evitará la deshidratación, puede ayudarte a moderar tu consumo de alcohol.
Bebe un trago la mañana siguiente, muchas personas apuestan por este remedio para la resaca. Aunque se basa en gran medida en mitos y evidencias anecdóticas, hay algunas pruebas que respaldan que tomar un trago a la mañana siguiente disminuye la resaca.
Intenta tomar algunos de los suplementos como Ginseng rojo, este reduce los niveles de alcohol en la sangre, así como la gravedad de la resaca. El jengibre también puede ser tu aliado, ya que al combinar jengibre con azúcar morena y extracto de mandarina mejora varios síntomas.
Ten en cuenta que faltan investigaciones y se necesitan más estudios para evaluar la efectividad de los suplementos.