La historia de “Güero” es una muestra más de la nobleza y lealtad que pueden demostrar los perros para con sus humanos. Y es que este perrito de raza mestiza, bautizado así por el color de su pelaje, se convirtió en noticia por su inquebrantable paciencia, luego de que su dueño, un adulto mayor, tuviera que ser llevado de emergencia a un hospital.

Según recogen testimonios de quienes atestiguaron el periplo de “Güero”, este llegó al Hospital General de Rincón de Romos, en Aguascalientes, México, tras haber perseguido el vehículo en el que vecinos llevaron de urgencia a su dueño. La mascota persistió y alcanzó al hombre justo cuando este era llevado en camilla, pero no le fue permitida la entrada al hospital por razones de salubridad. Lamentablemente, el dueño de “Güero”, un hombre mayor, quien vivía solo y su única compañía era su perro, ingresó ya sin signos vitales, por lo que los médicos no pudieron hacer nada por salvarlo.

Pero “Güero” no tenía planeado abandonarlo. Eso ocurrió hace aproximadamente ocho meses.

“Güero” encuentra nueva familia

Ana María Pizaña, jefa de Enseñanza, Capacitación, Investigación y Calidad del hospital en Aguascalientes, relata que el personal del hospital se dio cuenta de que, pese al triste desenlace del hombre, “Güero” se mantenía siempre en la zona, esperando a que algún día su dueño saliera para poder regresar juntos a casa.

“Él está esperando a su dueño y de hecho lo espera porque él no entra más que al área donde se le permitió, donde él lo vio por última vez y espera”, comentó por su parte la doctora Claudia Ramírez, citada por medios internacionales. “Entraba al área de choque y olfateaba. yo bajaba la camilla para que viera que no había nadie”, añadió.

La lealtad de “Güero” conquistó a los trabajadores del hospital, quienes decidieron adoptarlo. Ahora el perrito incluso tiene su propio gafete que lo acredita como miembro del personal (y también sus datos en caso de que se pierda), y se encuentra en la garita de seguridad, donde recibe cuidado y atención por parte del personal médico.

La doctora Ramírez apuntó que “Güero” es un perrito muy cariñoso, pero que no le gusta bañarse, y que ahora cuenta con el cuidado de su nueva familia en el hospital. “Yo le digo: ‘Ya no está aquí a quien esperas, pero aquí estamos todos; aquí te queremos todos’”, dijo la médica.