Pese a que ni Kim Kardashian ni Kanye West han oficializado su separación, ni tampoco en la corte se haya introducido la demanda de divorcio, medios especializados dan por hecho que la unión de seis años ha llegado a su fin.
Desde hace días TMZ, People y Page Six revelaron que los problemas que sostuvo la pareja desde hace meses los rebasaron y decidieron dar un paso al costado en beneficio de los cuatro hijos que comparten, abriendo las puertas a una millonaria ruptura.
Se dio a conocer que la socialité contrato a Laura Wasser, una prestigiosa abogada encargada de separaciones de famosos que tiene entre sus clientes a Johnny Depp, Angelina Jolie y Britney Spears.
De ser esto cierto, seguramente haría de mediadora para poder llegar a un acuerdo entre los dos, antes de trasladar a los tribunales la abultada fortuna que cosecharon desde su unión en mayo de 2014, sus bienes raíces y la custodia de sus pequeños.
Lo principal para ellos en este escenario será decidir cuál será el futuro de sus cuatro hijos: North, de 7 años; Saint, de 5; Chicago, de 2; y Psalm, de año y medio.
De acuerdo con People, estos podrían permanecer al lado de su madre en la mansión que tienen en California y su padre tendría un régimen de visitas determinado, según los resultados que arrojen las negociaciones o el posterior conflicto legal.
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La fortuna en común
Cuando Kim Kardashian y el también empresario contrajeron matrimonio, el capital de ella era de 30 millones de dólares mientras que el del intérprete de “I love it” era de casi 100, pero hoy el panorama es distinto.
Forbes, citado en el mismo medio, afirma que el patrimonio de la estrella de reality show ahora es de 370 millones, cuestión que la hizo aparecer en el puesto 48 en la lista de celebridades mejor pagadas durante 2020 con ingresos de casi 50 millones al año.
Eso no es todo. Este año la cifra podría aumentar considerablemente ya que estaría en las puertas de vender el 20% de las acciones de su línea de belleza KKW Beauty a la empresa Coty por 200 millones de dólares.
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Kanye West, por su parte, se convirtió el año pasado en multimillonario oficialmente, no solo por su música sino también por su compañía de zapatos, Yeezy, que se ha vuelto un éxito desde su lanzamiento.
Todo esto complica los términos de distribución de la riqueza en partes iguales, a menos que exista un acuerdo prenupcial que agilizaría el proceso y evitaría enfrentamientos al haber más de 2 mil millones de dólares de por medio.