A sus 74 años, Danny Trejo sigue triunfando en Hollywood. El famoso actor estadounidense de ascendencia mexicana tuvo un pasado difícil, el cual logró superar con el paso de los año.
Cabe resaltar que Trejo, nunca tuvo estudios de actuación, y tampoco pertenece a una familia de alto poder adquisitivo. Sin embargo, por azares del destino, entró al mundo del cine para quedarse en él.
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Danny llegó al mundo un 16 de mayo de 1944, es hijo de padres mexicanos radicados en Estados Unidos.
La juventud del actor fue un poco complicada, lo que lo llevó a cometer varios delitos, inclusive estuvo en prisión en diversas ocasiones.
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Durante una entrevista para USA Today, el actor resaltó que a los ocho años probó la mariguana y a los doce, la heroína.
Trejo vivió en los barrios pobres de Los Ángeles y como el crimen estaba al alza, se integró al mundo delictivo, al punto de ser arrestado y encarcelado durante nueve años por mano armada.
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A los 26 años, Danny ya había pisado seis cárceles en Estados Unidos, sin embargo en la prisión San Quentin su vida cambió de forma repentina.
Lo bueno llegó para Danny Trejo
De acuerdo con una publicación de “Excélsior”, a mediados de los 80, el estadounidense se dedicó a ser maestro del pugilismo.
“Me recuerdo diciendo: ‘Dios, si estás ahí, regresa todo al camino que se supone debe ser. Si no estás, estoy jodido”, relató Trejo.
Luego de un tiempo en la cárcel, salió en libertad condicional en 1969. Ese mismo año entró al programa “12 Pasos”, el cual le ayudó a dejar sus adicciones y las drogas. Dicho hecho hizo que se convirtiera en un ejemplo para los jóvenes.
Fue en 1985 cuando fue descubierto durante el rodaje de la película “Escape en tren”. El actor visitaba el set de grabación para asesorar sobre movimientos de box. La forma de hablar y su imagen llamó la atención del director, quien lo reclutó inmediatamente.